Hace años viví experiencias familiares difíciles que me hacían sentir mucho estrés y malestar general. Me sentía mal pero no sabía dónde acudir para pedir ayuda. Una amiga me recomendó la clínica de Mª Angeles Buendía. Ya en la primera entrevista ella percibió el fuerte dolor emocional que yo estaba experimentando y que hacía que mi cuerpo fuera somatizando una serie de enfermedades autoinmunes: hipotiroidismo, vitíligo…
El tratamiento que realizó y realiza siempre es integral. Paliar los síntomas es importante, pero para eliminar la enfermedad hay que ir al origen, a la causa, a la emoción, a la creencia… Y, ella lo hace. En la medida en que se fueron curando mis heridas del alma mi salud física comenzó a mejorar y mi piel comenzó a repigmentarse, quedando reducido el vitíligo a pequeñas zonas, de las que estoy segura desaparecerá.
Desde aquella primera cita he vuelto a ir en varias ocasiones y siempre con resultados muy satisfactorios.
La clínica, además, oferta múltiples actividades relacionadas con el bienestar físico, mental y espiritual para un mayor conocimiento y crecimiento interior. Todo se desarrolla en un ambiente sereno, equilibrado y armonioso.
Te doy las Gracias a tí, Mª Ángeles, y a todo el equipo humano que forma parte de la Clínica por todo vuestro saber hacer.
