¿Qué es brainspotting?
Resolución de traumas emocionales
Brainspotting es una técnica psicológica que utiliza el campo visual para localizar en el cerebro el lugar donde se han quedado enquistados los traumas emocionales y acompaña a su reproceso con ayuda y liberación.
Brainspotting es un método terapéutico revolucionario que desarrolló David Grand en 2003, y que consiste en utilizar el campo visual para localizar “posiciones oculares relevantes” (Brainspots o puntos cerebrales) que se correlacionan con la estimulación de áreas neuronales y con la experiencia interna del recuerdo o el contenido que se quiere trabajar, en forma de imagen, emoción o sensación corporal. El cerebro es una máquina procesadora que dirige y organiza todo lo que experimentamos de manera muy eficiente; sin embargo, ante un trauma esta capacidad de procesamiento puede verse superada y el cerebro puede dejar paralizadas partes del trauma que han sido imposibles de procesar. Brainspotting permite aprovechar la capacidad innata de autocuración que tiene nuestro cerebro ya que éste puede activar, localizar y procesar las causas originales del trauma y malestar corporal.
Ojos y cerebro trabajan de manera coordinada: los ojos son un instrumento que introduce información a nuestro cerebro para orientarnos en nuestro entorno, y el cerebro redirige nuestra vista en una dirección o en otra. El Brainspotting sirve en estos casos para localizar a través del campo visual el lugar en el que estos traumas han quedado enquistados dentro del cerebro. Es decir, igual que los ojos escanean el exterior en busca de información, pueden escanear en busca de información en el entorno interior (cerebro). El lema de Brainspotting es “Donde miras afecta a lo que sientes”. Esto quiere decir que, si algo te perturba, lo que sientas cambiará de manera literal dependiendo del punto de espacio visual donde fijes la mirada (izquierda o derecha). Utilizamos el campo visual para redirigir el escáner hacia sí mismo e instar al cerebro a que explore la información perdida dentro de él. Si se mantiene la mirada enfocada a un punto externo determinado, hacemos que el cerebro preste toda su atención a un determinado punto interno en el que se ha almacenado el trauma, y conseguimos así activar el procesamiento profundo que lo resolverá, liberándonos del malestar.
La presencia del psicoterapeuta en sintonía, empatía y actitud de escucha activa, es lo que apoya a la curación del paciente. En Brainspotting, el terapeuta crea el marco neurobiológico, al encontrar las posiciones oculares relevantes en colaboración con el paciente, que está activado en torno a la cuestión que se desea tratar. Por ello es imprescindible una presencia sintonizada del terapeuta y de mero testigo, sin ideas preconcebidas y siguiendo meticulosamente el procesamiento del paciente, mientras este mantiene el foco en el Brainspot al tiempo que observa con atención focalizada su proceso interior. Este marco relacional protector se mantiene en todo momento por la atención constante que ambos prestan al proceso, a las sensaciones corporales y al procesamiento.
¿en qué casos es eficaz brainspotting?
El Brainspotting ha demostrado ser útil en multitud de dificultades y trastornos. Sobre todo en aquellos casos en los que el problema tiene componentes tanto físicos como emocionales.
- Traumas que incluyen: Trastorno de Estrés postraumático, experiencias de abuso sexual o de cualquier tipo, accidentes, agresiones, situaciones muy impactantes que hayan dejado en shock…
- Trastornos del estado de ánimo o trastornos de ansiedad.
- Fobias y miedos que pueden limitar la calidad de vida.
- Dolor crónico, fibromialgia, fatiga crónica.
- Adicciones, trastornos de alimentación.
- problemas en el control de los impulsos, ira o agresividad.
- Trastornos de personalidad.
- Problemas de adaptación o de rendimiento que afectan diversas áreas de la vida.
- Dificultades relaciones, crisis personales.
terapeutas
